Un mercado de trabajo sombrío
Hace pocos días se han publicado los datos del tercer trimestre de la Encuesta de Población Activa que elabora el INE (Instituto Nacional de Estadística) y de Paro registrado que publica el SPEE (Servicio Público de Empleo Estatal). Las cifras publicadas muestran, sin lugar a dudas, el empeoramiento de la situación del mercado de trabajo, que la pérdida de empleo continúa y que el paro alcanza cotas más altas cada trimestre.
Las tasas de ocupación que se habían alcanzado con la creación de empleo experimentada desde principios de la década de los noventa llegaron a su máximo durante 2007 y, desde entonces, se han reducido sustancialmente, tal y como se puede apreciar en el Gráfico 1. La tasa de empleo masculina en España superó durante 2007 el 65%, pero en el tercer trimestre de 2011 se sitúa en el 53,4%, lo que significa una pérdida de 8 puntos porcentuales en cuatro años y, en valores absolutos, una pérdida de más de dos millones de puestos de trabajo respecto al tercer trimestre de 2007 (2.055.600). Para las mujeres, la reducción ha sido menor y más tardía como consecuencia de su menor presencia en los sectores industrial y construcción, aunque también se ha registrado una pérdida de empleo importante, pasando del 44% en 2008 al 41,2% en el tercer trimestre de 2011 (298.800 empleos).
Los datos para Asturias, apenas muestran diferencias respecto a la tendencia nacional. Aunque durante 2008 la ocupación seguía aumentando, en el cuarto trimestre de dicho año comienza la pérdida de empleo que ha llevado a una reducción de diez puntos en la tasa de empleo masculina y de 3 en la femenina.